Cuarto día.

Buenas tardes,

Hoy por la mañana, después de desayunar, nos hemos ido todos juntos a hacer algo de deporte en el campo de hierba, al lado del río.

Tras dejarnos la piel en cadenetas, gavilanes, fútbol atados por parejas y algún que otro juego, de camino de vuelta a casa nos hemos refrescado y divertido mucho con los aspersores que regaban las zonas de alrededor de nuestro campo de juego.

Nada más llegar, ducha y división del grupo en clase de inglés y charla con Don Lorenzo antes de comer.

Las judías verdes que nos ha preparado el equipo de cocina han triunfado una barbaridad y ha repetido muchísima gente... Aunque más gente aún ha repetido con las albóndigas con tomate que teníamos de segundo plato.

Después de comer hemos continuado con los campeonatos de ping-pong por parejas (Que ha ganado la pareja mixta de monitores a la pareja de acampados del Tío Jorge en una final muy concurrida pero poco disputada) ajedrez y futbolín. Estos dos últimos campeonatos no ha dado tiempo a terminarlos, con lo que los continuaremos en los próximos días.

A las cinco y media los del inglés antes de comer se han ido a la charla y los de la charla al inglés, para completar nuestras horas diarias de idiomas y, a las siete de la tarde todos hemos subido a ponernos calzado cómodo y a coger cantimplora, chaqueta, linterna y mochila.

Y es que, algo más tarde de las siete, hemos salido de expedición a Sieste, que es un pueblo pequeño y muy bonito que está a pocos kilómetros de Boltaña. Allí arriba, a las nueve y media hemos cenado unos estupendos bocadillos de longaniza y, ya de bajada, hemos parado en un campo que nos ha venido perfecto para hacer nuestra velada astronómica, dirigida por el monitor Pablo, que es un experto en la materia.

Llegamos un poco cansados a casa, pero ha merecido la pena...

Saludos!